Seguridad en casa: cómo prevenir el estrangulamiento y el quedarse atrapado

Los niños se pueden enganchar o quedar atrapados de las formas más inesperadas, incluso los cordones y tiras de sus prendas de vestir, los muebles y otros accesorios para lactantes, pueden ser peligrosos.

Evite los peligros potenciales

Para proteger a su hijo de posibles estrangulamientos y de quedarse atrapado, siga estos consejos:

• Si su hijo es un lactante, no le ponga collares ni cintas en la cabeza.
• No vista a su bebé o hijo pequeño con prendas provistas de tiras o cordones ajustables, que, al poder quedar enganchados en muebles o instalaciones recreativas, se asocian a riesgo de estrangulación. Si su hijo es un lactante o un niño pequeño, corte todos los cordones de capuchas y chaquetas, así como las cintas con hebillas o broches de sus prendas de vestir. Corte también los cordones de sus guantes y manoplas.
• No deje a su hijo solo en su silla de paseo; los bebés pueden resbalarse o deslizarse hacia abajo, pudiendo quedar atrapada su cabeza.
• No utilice cunas con recortes en la cabecera o en los pies.
• Asegúrese de que el colchón de la cuna de su bebé sea del tamaño adecuado y que encaje bien en el armazón de la cuna. Así, el bebé no podrá quedar aprisionado entre el colchón y los lados de la cuna.
• No ponga a dormir a su bebé en una cama para adultos, un sofá u otras superficies blandas.
• Coloque el móvil de la cuna fuera del alcance del bebé y extráigalo de la cuna cuando su hijo tenga unos cinco meses de edad o cuando lo pueda alcanzar con las manos o las piernas. Corte y extraiga los cordones y las cintas de todos los juguetes que el bebé tenga en su cuna.
• Evite utilizar protectores laterales de cuna. Aunque puedan parecer blandos y dar la sensación de que protegen al bebé de los golpes, no sirven para prevenir las lesiones graves. Según la Comisión para la Seguridad de los Productos de Consumo (CPSC, por sus siglas en inglés) de EE.UU., una serie de muertes accidentales parecían estar relacionadas con el uso de protectores de cuna o de moisés. Tanto la Academia Americana de Pediatría (AAP) como la Sociedad Pediátrica Canadiense (SPC, por sus siglas en inglés) desaconsejan su uso.
• Asegúrese de que los listones de la cuna distan entre sí un máximo de 2 pulgadas con 3/8 (o 6 centímetros); si distaran más, la cabeza del bebé se podría colar entre los listones y quedar atrapada.
• Las literas solo deben tener un espacio estrecho entre la barandilla y el colchón. No permita a un niño menor de seis años dormir en literas.
• No ate un chupete alrededor del cuello del bebé ni lo sujete a su ropa con una cinta o cordel.
• No cuelgue bolsas de pañales ni bolsos en la cuna del bebé porque este se podría enredar en sus tiras o asideros.
• Quite el babero al bebé antes de acostarlo para hacer la siesta o para dormir por la noche.
• No permita que el cable largo del teléfono cuelgue sobre el suelo.
• No utilice vallas o barreras de seguridad antiguas tipo acordeón; cuando se pliegan sobre sí mismas, pueden atrapar la cabeza del niño.
• No coloque nunca la cuna del bebé, la cama del niño ni cualquier otro tipo de mueble infantil cerca de persianas o cortinas.
• Ate todas las correas de cortinas y persianas o bien corte sus extremos y fíjelos a la pared con anclajes de seguridad.
• Instale topes de seguridad en las correas internas de las persianas.
• Elija cajas o baúles sin tapa para los juguetes de su hijo.

Esté bien preparado

Si está esperando a un bebé o si ya tiene uno o varios hijos, es sensato que:

• Aprenda las técnicas de reanimación cardiopulmonar (RCP) y la compresión abdominal (maniobra de Heimlich).
• Tenga los siguientes números cerca del teléfono (tanto para su propio uso como para el de otras personas que cuiden de su hijo):
  • teléfono del centro de toxicología 1-800-222-1222
  • teléfono del médico de su hijo
  • teléfonos de los móviles de sus padres y de los lugares donde trabajan
  • teléfonos de un vecino o de un pariente que viva cerca de su domicilio (por si necesitara que otras personas vigilaran a sus otros hijos en caso de emergencia)
• Disponga de un botiquín de primeros auxilios y guarde las instrucciones a seguir en caso de emergencia en su interior.
• Instale detectores de humo y de monóxido de carbono en su casa.

Una casa segura y adecuada para los niños

Para comprobar la eficacia de sus esfuerzos por poner su casa a prueba de niños, póngase a gatas en cada una de las habitaciones de su domicilio para verla desde la perspectiva de un niño. Preste atención al entorno que rodea a su hijo y fíjese en aquellos objetos que podrían resultarle peligrosos.

Poner una casa totalmente a prueba de niños puede ser complicado. Si no puede poner toda la casa a prueba de niños, puede cerrar las puertas (instalando protectores de seguridad en sus pomos) para que su hijo no pueda acceder a lugares no protegidos. Para las puertas corredizas, los protectores de seguridad y los pestillos a prueba de niños van muy bien para impedir que un niño pequeño salga solo de su casa.

Por descontado, cuán a prueba de niños es su casa es algo que solo depende de usted. Observar atentamente a un niño es la mejor forma de protegerlo de posibles lesiones.

Independientemente de que usted tenga un bebé, un niño pequeño o un niño en edad escolar, su hogar debería ser un lugar seguro donde su pequeño pueda explorar libremente. A fin de cuentas, tocar, agarrar, trepar y explorar el entorno de otras formas son las actividades que permiten desarrollar tanto el cuerpo como la mente de su hijo.