Story by: Tos seca en niños y como tratarla on August 16, 2021
English versión: https://nortonchildrens.com/news/6-types-kids-coughs-explained/
La tos de un niño puede ser un signo de un simple resfriado o algo más serio que necesita atención médica. Aquí hay seis tipos de tos, incluida la tos seca en los niños, y cómo tratarlas.
También llamada tos seca; si persiste después de un resfriado, es probable que sea causada por mocos residuales que eventualmente desaparecerán. Si la tos seca de un niño ocurre principalmente por la noche, su hijo podría tener asma. La mucosidad en los conductos pulmonares inflamados y estrechos causa irritación que crea tos. Es más común cuando está acostado, después de hacer ejercicio, al aire libre y cuando el niño tiene un resfriado o alergias.
Si la tos seca de su hijo empeora por la noche o después de hacer ejercicio, un pediatra debe examinarlo para ver si tiene asma. Esta es una condición que necesita intervención médica y no desaparecerá por sí sola.
Ayuda en casa: Controle los factores desencadenantes del asma como el polvo, el moho, el polen y la caspa de las mascotas. Si no es asma, su hijo debe beber muchos líquidos mientras la mucosidad sale de su sistema.
Una tos con mucha mucosidad o flema suele ser un signo de un resfriado, especialmente si su hijo también tiene secreción nasal y dolor de garganta. Si la tos se acompaña de fiebre y moco verde espeso, podría tratarse de una infección de los senos nasales. Si su hijo ha tenido un resfriado y la tos está empeorando, podría ser neumonía.
Un resfriado tiene que desaparecer por sí solo; los antibióticos no ayudarán. Si sospecha una infección de los senos nasales o neumonía, llame al pediatra de su hijo.
Ayuda en casa: Si su hijo es demasiado pequeño para sonarse la nariz, use una pera de goma para eliminar la mucosidad. Las gotas nasales salinas también pueden ayudar, junto con un humidificador de vapor frío. Los medicamentos para el resfriado de venta libre hechos solo para niños pueden ayudar, pero consulte primero con un farmacéutico o un pediatra.
Un bebé que tiene una tos con sibilancia o una tos que suena como un gorgoteo o ronca, podría tener una infección de las vías respiratorias llamada RSV (virus sincitial respiratorio). Esto afecta con mayor frecuencia a los bebés en los meses de invierno. En un niño mayor, lo que está escuchando podría ser asma.
El RSV generalmente desaparece por sí solo, pero informe al pediatra de su bebé lo que está sucediendo. Si su bebé tiene problemas para respirar, necesita atención médica de inmediato. Si es un niño mayor, haga que lo examine un pediatra.
Ayuda en casa: Un humidificador de vapor frío en la habitación del niño puede ayudar con la congestión. Asegúrese de que su hijo descanse lo suficiente y tome líquidos.
Si su hijo tiene tos acompañada de cansancio, fiebre y dolor, es posible que tenga gripe o influenza. La gripe es un virus que puede incubarse en un niño durante días antes de que comience a sentirse enfermo.
El virus de la gripe tiene que salir del organismo de su hijo. Si su hijo tiene dificultad para respirar o fiebre persistente, llévelo al médico.
Ayuda en casa: Beber muchos líquidos, descansar y tomar acetaminofén o ibuprofeno para niños, lo que ayudará a aliviar los síntomas.
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Una tos que suena como un ladrido con un silbido agudo cuando su hijo inhala podría ser Crup. Este virus generalmente afecta a niños de 6 meses a 3 años y causa inflamación en la tráquea, creando un silbido revelador.
Aunque el Crup generalmente desaparece por sí solo, llame al pediatra de su hijo si lo sospecha. Si su hijo tiene dificultades para respirar, llame al 911.
Ayuda en casa: Un humidificador de vapor frío en la habitación de su hijo, tomar una ducha caliente o sentarse en un baño lleno de vapor puede ayudar a aliviar los síntomas. Además, asegúrese de que su hijo beba muchos líquidos.
El sonido de esta tos también es el nombre de una enfermedad viral potencialmente grave. Si su hijo tiene ataques de tos y hace un silbido cuando inhala, podría ser tosferina– causada por una bacteria llamada tosferina. Los bebés tienen más probabilidades de tener tosferina porque aún no han tenido todos sus refuerzos para DTaP, una vacuna que protege contra la difteria, el tétano y la tosferina. En los bebés, la tos puede ir acompañada de atragantamiento o vómitos en lugar de un sonido de silbido.
Llame al médico de su hijo de inmediato si sospecha que tiene tosferina. Es muy contagiosa pero también muy tratable.
Ayuda en casa: Asegúrese de que su hijo descanse y se relaje lo suficiente. Quedarse en una habitación fresca, silenciosa y oscura puede ayudar, además de disminuir el riesgo de propagar gérmenes. El niño también debe beber muchos líquidos y evitar áreas donde el aire pueda ser irritante, como alrededor de chimeneas o humo pasivo.
-Revisado por Jameel T. Clark, MD, pediatra, Norton Children’s Medical Group – Dixie